Hitlerismo a la poblana

Ahora que el CRIT poblano empezó a funcionar habrá que felicitar a la UPAEP. ¿Y por qué a la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla? Pues porque es la única institución educativa autorizada para que sus egresados sean contratados por el Centro de Rehabilitación Integral Teletón.

La UPAEP hace su trabajo y está bien. Sin embargo, la actitud discriminatoria, sectaria y selectiva de la Fundación Teletón, debe ser denunciada por las organizaciones de derechos humanos. Y es que para poder trabajar en el CRIT poblano, el primer criterio es ser egresado de la UPAEP.

No importa si se es capaz para el desempeño de la función. Lo de menos es la experiencia en el sector salud. Lo menos trascendente es la capacidad, inteligencia o atributos de la gente que quiera desempeñarse en el CRIT. El primer criterio es ser egresado de la UPAEP. Ah y ya si sobra lugar, pues entonces vemos.

¿Y las demás universidades? ¿y el talento de la gente? ¿y la experiencia que puedan acumular? ¿y la calidad educativa de instituciones como la BUAP, UDLA, Ibero y otras? Como todo en México: primero los cuates y luego el talento.  Pero el tema es ¿bajo qué criterios se da preferencia a los egresados de la UPAEP por encima de los demás para ser contratados en el CRIT?

Es una especie de hitlerismo a la poblana.

La división del voto

Aquí el tema es saber si los votos del PRI y del PRD van a dividirse como en las elecciones presidenciales del 2006. En aquella ocasión, los mexicanos priistas decidieron votar por Andrés Manuel López Obrador, quien representaba una esperanza para salir de la pobreza. La verdad es que quién sabe (seguro que no) si con López Obrador México hubiera salido de la pobreza, como lo prometía en sus discursos. Lo que sí es cierto es que entre otras mentiras, Felipe Calderón prometió disminuir los precios de los costos de la energía eléctrica y del gas doméstico. Con Calderón, ambos costos han aumentado-

El reto del candidato (aun precandidato) presidencial del PRI Enrique Peña Nieto, es evitar que el voto priista se le divida y que afecte, tanto al PRI como al PRD, en el entendido de que los panistas siempre llegarán a sumar su voto promedio que oscila entre los 8 y 10 millones.

Es claro que López Obrador tendrá los votos de la izquierda y nada más.

Es claro que Peña Nieto sumará a todos los priistas y tal vez a otros más de quienes se fueron con Calderón en el 2006, ante el temor de que López Obrador hiciera de México una copia de Venezuela.

Es claro que los panistas están con Josefina Vázquez Mota y asumen el riesgo de que Calderón se imponga con Ernesto Cordero y pierdan las elecciones que, hoy mismo, están perdidas para ellos.

A final de cuentas, aun es el 2011 y para las elecciones federales falta mucho tiempo. Aun así, Peña Nieto pinta para presidente.

El Verdugo

¿Alguien sabe algo de Mario Marín? Sus aspiraciones de ser Senador y de que su hijo Mario fuera diputado se esfumaron. El Verdugo dice: si lo ven, díganle también que Jesica necesita el gasto para pagar la colegiatura de Marianita. Es en serio, eh.