jueves, 12 de septiembre de 2013

Mejor váyanse con Moreno Valle

Por: Carlos Macías Palma
cmaciaspalma@yahoo.com.mx
@cmaciaspalma


No hay mucho que buscar, ni investigar, ni rascar ni nada que se le asemeje si hay que demostrar que el PRI poblano enfrenta la crisis más grave en toda, en toditita su historia. No solamente fue el momento en que Rafael Moreno Valle ganó la gubernatura aquel julio del 2010, sino que se han sumado una serie de derrotas y pérdida de control político y hasta de identidad.
Personas que buscaron en el PRI una oportunidad, la encontraron mucho mejor en el morenovallismo: Antonio Gali Fayad hoy alcalde electo de Puebla; Julio Lorenzini Rangel, Mario Rincón y Eukid Castañón, secretarios de Medio Ambiente, Desarrollo Social y Contraloría, Jorge Aguilar Chedraui y Patricia Leal Islas, diputados locales electos. Todos ellos son quienes son hoy, gracias a Moreno Valle. Bueno, el mismo gobernador fue uno de los elementos que los priistas presumían como suyo.
El caso es que el PRI en Puebla está devastado. Para la próxima legislatura local alcanzará apenas 5 diputados y menos de una centena de alcaldías… de pueblitos (con todo respeto). Nada significativo, nada importante y nada que haga equilibrios políticos.
A esta crisis se le suma el mínimo de liderazgos, pero liderazgos en serio: Blanca Alcalá Ruíz, José Chedraui Budib, Enrique Doger Guerrero y hasta Javier López Zavala. Los demás, son cabezas de grupos minúsculos que no representan liderazgos reales o competitivos: Alejandro Armenta Mier, Juan Carlos Lastiri Quirós, José Luis Márquez, Jesús Morales Flores, por mencionar algunos.
El gobernador por su parte, un hombre pragmático que venció al PRI y se apropió del PAN va acotando al PRI y a los priistas.
En el comité nacional tricolor a César Camacho Quirós su presidente y a Ivonne Ortega su secretaria general lo que menos les importa es Puebla, sus priistas y su mínima representación. Vaya, no podrán siquiera recomendar a algún amigo constructor o a alguna empresa consultora de servicios municipales. No tienen nada.
En el comité estatal pasa que no pasa nada. Analizar los resultados que la dirigencia de Pablo Fernández deja para la historia, no alcanza ni para un párrafo de 6 líneas. En el comité municipal de Puebla Claudia Hernández perdió la elección y regresa tan sólo para tener oficina.
En el Congreso del Estado los actuales diputados hacen de vez en cuando una declaración opositora que sólo sirve para llenar los espacios en la prensa. Algunos de ellos no sólo están acotados, sino espantados y otros hasta cómplices son del morenovallismo. El gobernador no los necesita para aprobar sus leyes y caprichos. Demostrado está.
Los diputados federales ni aparecen. Lo único que se sabe de ellos es que quieren cambiar a Carlos Sánchez, su inepto coordinador. Y de ahí en fuera muy poco, salvo algunas colaboraciones en medios de comunicación y ya. Dedicados a la chamba en la Cámara de Diputados, pero al PRI poblano no le aportan… ¿ni sus cuotas?
Devastado por los resultados y acotado por el morenovallismo, el priismo poblano va a deriva, sin síntomas de mejoría en los próximos años. Mejor deberían convertirse todos, en morenovallistas, así algo ganarían.

El Verdugo

Dos promesas en la política poblana se diluyeron. Eran algo así como la nueva generación que tanto necesita el PRI. Pablo Fernández y Carlos Sánchez fracasaron en su intento. El Verdugo dice: El Verdugo, ya  mejor ni dice.
Gracias

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