Por: Carlos Macías Palma
El
2013 es año electoral. Van a enfrentarse 3 coaliciones en la búsqueda
de la mayoría del Congreso del Estado y las 217 presidencias
municipales. Los partidos, Revolucionario Institucional y Verde
Ecologista de México se unirán para enfrentar a los partidos, Acción
Nacional, de la Revolución Democrática y Nueva Alianza. A su vez, estas
coaliciones, competirán con la que formen los partidos Movimiento
Ciudadano, del Trabajo y Movimiento de Regeneración Nacional, Morena
para los cuates.
En
la competencia electoral van a enfrentarse dos poderosos grupos
políticos: Uno de ellos lo conforman el presidente Enrique Peña Nieto y
su partido, el tricolor con lo que pueda sumarle el Verde Ecologista que
no es definitorio, pero tampoco deja de ser importante.
Del
otro lado estarán el gobernador panista Rafael Moreno Valle y su aliado
el perredista Marcelo Ebrad quien para ese entonces (julio del 2013)
estará un poco opacado por su sucer en el Distrito Federal Miguel Angel
Mancera. A ellos, va a liderear su madrina política, la vieja conocida
de todos: Elba Esther Gordillo Morales, la Maestra.
En
el ala de la extrema izquierda van a sumarse a Andrés Manuel López
Obrador de Morena, los partidos de media tabla: del Trabajo y Movimiento
Ciudadano. La ilusión que tienen es que puedan continuar con las
preferencias conseguidas por López Obrador en la pasada elección
federal.
En
Puebla la competencia se torna interesante entre un ganador permanente
como lo es Moreno Valle, contra otro ganador permanente, Enrique Peña
Nieto. Desde luego que el gobernante poblano no podrá dejar que le ganen
las elecciones porque aunque el otro es el Presidente de México, en las
elecciones se juega en serio y no hay nada negociado. El poder político
no se negocia.
Peña
Nieto va a operar en Puebla de manera fuerte a través del hoy grupo
poderoso que forman Blanca Alcalá, Jorge Estefan y Juan Carlos Lastiri,
por mencionar a los más notorios. El mandatario estatal saldrá a pelear
la plaza con sus operadores políticos, con sus estrategias y con los
recursos económicos con los que dispone. Claro que del otro lado también
hay mucha lana.
El
2013 es el año clave para que el gobernador Moreno Valle consolide sus
aspiraciones presidenciales, pues deberá tener el control del Congreso
del Estado, lo que le permitirá la aprobación de sus cuentas públicas y
dejar a un sucesor, el gobernador que durará en el cargo un año 8 meses,
que esté a su servicio. Por eso las elecciones del otro año son
trascendentes para el morenovallismo.
Desde
luego que el presidente Peña Nieto no va dejarse ganar en plazas
importantes a menos de un año de haber asumido el poder. Sería como
hacer el ridículo. Además, Peña ha demostrado ser un estratega eficiente
y ganador.
El Verdugo
La
gente cree que Peña Nieto no es capaz de leer un libro, recordar
autores y tener que utilizar el telepromter para hablar el público. El
Verdugo dice: y… así es Presidente.
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