martes, 22 de octubre de 2013

La del 2015 será elección sencilla

Por: Carlos Macías Palma
cmaciaspalma@yahoo.com.mx
@cmaciaspalma


Si que va a ser complicado para el PRI de Puebla conseguir a un Presidente que alcance el grado de líder. Y no porque falten personalidades con capacidad de rescatar a un partido sumido en la derrota que a final de cuentas lo es todo, sino porque lo más difícil será el reconocimiento de los otros aspirantes y grupos que se queden en el camino.
El reto de quien asuma la dirigencia estatal priista, será el de entregar buenos resultados en las elecciones del año 2015, cuando estarán en disputa 15 diputaciones federales que dicho sea de paso, le harán mucha falta al Presidente Enrique Peña Nieto para la segunda parte de su mandato.
Y es que no es lo mismo tener mayoría en la Cámara de Diputados que no tener mayoría. De ahí que el Presidente Peña deberá  tener al mayor número de legisladores priistas en la próxima Legislatura y para ello, hace falta que Puebla pueda aportarle por lo menos 10 de 15; es decir la tercera parte (como mínimo) de lo que estará en disputa.
El reto del próximo Presidente… o Presidenta del PRI será el hacer un tejido fino para evitar rupturas, divisiones y pleitos que tanto daño le hacen a partidos como el tricolor. En esa tarea, tratar de que la política, imagen y bonos del Presidente puedan permear entre los ciudadanos, de tal manera que el número de votos vayan sumando para alcanzar al mayor número de diputados.
Quien ocupe la dirigencia priista de Puebla para los años 2014 y 2015 tendrá una ventaja a su favor: no va a competir con la estructura del gobernador Rafael Moreno Valle. Para las elecciones del 2015 no habrá candidaturas comunes, ni disputas por presidencias municipales, ni abandonos de última hora de las planillas priistas; ni alianzas que en la suma de sufragios le ganen al PRI; ni nada por el estilo que vivimos en las recientes elecciones locales.
Otra de las ventajas que tendrá el próximo dirigente tricolor, es que habrá de enfrentarse al PAN, al PRD y a Nueva Alianza pero por separado, de tal manera que no habrá unión de todos contra el PRI, aunque es posible, muy posible que para el caso de Puebla pudieran existir coaliciones PAN-PRD, pero se ve muy complicado.
Y es que en caso de coaliciones, uno de los partidos políticos permitirá que las prerrogativas sean manejadas por su aliado. Es decir, si el PAN y el PRD se unen, el dinero sería administrado por los panistas y los perredistas no van a permitir que les quiten sus centavos.
Desde luego que enfrentar la elección del 2015 no será fácil para quien encabece al PRI local, pero tampoco será complicado porque va a competir contra el PAN, no contra Moreno Valle. Y eso, eso ya es ventaja…. Mucha ventaja.

El Verdugo

Si el PRI tiene perdida la capital poblana con 4 diputados federales y la zona de San Andrés Cholula-Atlixco, en teoría sólo podrá ganar 10 distritos en el 2015. El Verdugo dice: empiecen a pelearse por interior del Estado. Aquí, en la capital están desahuciados.
Gracias

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