or: Carlos Macías Palma
Pepe Chedraui. Nada que perder
Apegado al “librito” y al más puro estilo de Peña Nieto, el aspirante a la presidencia municipal de Puebla José, Pepe, Chedraui ha venido avanzando en una estrategia diseñada para su posicionamiento entre los habitantes de la ciudad de Puebla. No sólo cuenta con un equipo de “tierra” que le permite acercarse a la estructura priista, sino que le han asesorado aceptablemente en materia de comunicación.
Pepe Chedraui es la novedad en la política poblana y aldeana. Pese a su novatez en cuestiones políticas, el joven empresario ha incursionado con éxito es las movedizas arenas de una contienda preelectoral en la que no sólo se enfrenta a sus adversarios de partido (el PRI) sino al gobernador, a Acción Nacional y al escepticismo ciudadano en los políticos.
Y mientras el tiempo de la decisión final se acerca, Pepe Chedraui concede entrevistas a todos los periodistas quienes se lo solicitan; va a la radio y tiene cápsulas; visita colonias y se reúne con la estructura tricolor; va a comer con su amigo el presidente electo y lo promociona en Puebla; asiste a toda invitación que le giran. En fin, anda en abierta campaña para convertirse en candidato y alcalde de Puebla en el futuro inmediato.
Aun y con la escuela peñanietista, nuestro personaje tiene retos que vencer antes de convertirse oficialmente en candidato del PRI a la presidencia municipal de Puebla. Dos de esos retos tienen nombre y apellido: Enrique Agüera Ibáñez y Enrique Doger Guerrero.
Y bien, la parte más amable de su campaña es lo que está aprendiendo; que no dejará de ser amigo del presidente de la República; que si no es candidato a alcalde no pasa nada; que tendrá otras oportunidades en la administración pública; que podrá intentarlo más adelante y que puede es posible que en un futuro logre gobernar esta ciudad.
Así es que Pepe Chedraui nada tiene que perder o dicho de otra manera, tiene todo que ganar. De hecho, está en competencia con Agüera y con Doger y de entre ellos tres se elegirá al candidato a alcalde. Ya no caben más.
Ahora bien, falta comentar lo que el rector Agüera y el diputado Doger tienen en su muy abultado capital político.
El Verdugo
Desde el cerro de Loreto le mandaron un obús a Pepe Chedraui. Lo ligaron a Mario Marín con la leyenda de que el “gober precioso” se sumará a su proyecto por la alcaldía de esta capital. El Verdugo dice: el señor de los cerros es de cuidado, hasta que Peña no lo meta en orden.
Gracias
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