Nuevo poder priista

 Nuevo poder priista

Por: Carlos Macías Palma


Una serie de “padrinos políticos” le han surgido a Pablo Fernández del Campo recién designado presidente del PRI estatal. Unos dicen que por su cercanía con Jorge Estefan Chidiac secretario de Finanzas del comité nacional tricolor y próximo presidente del SAT (Sistema de Administración Tributaria); otros lo ligan a su relación con José Chedraui Budib amigo personal del presidente electo Enrique Peña Nieto.
Y hay otras versiones, hasta algunas disparatadas como ligarlo a Mario Marín (ja ja ja). Pues ya sea por el lado de Estefan, de Chedraui, de Juan Manual Vega, de Juan Carlos Lastiri, de Blanca Alcalá o por Peña Nieto, lo único que queda claro es que ni Marín, ni Zavala, ni Melquiades han influido en la de controlar el PRI en el Estado.
Así es que impuesto, recomendado, respaldado, apoyado o lo que sea por cualquiera de sus “padrinos políticos”, lo cierto es que Fernández del Campo no está ligado al pasado reciente del grupo que tuvo el poder: el marinismo. Pablo respetará a los militantes, pero los grupos del pasado ya no mandan en el PRI.
Independientemente del mensaje que representa haber cambiado al dirigente tricolor, la señal que se manda es el cambio de liderazgos. Por ejemplo, el gobernador tiene el control del presidente del Congreso del Estado a través del diputado federal Javier López Zavala, su mejor aliado entre un sector del priismo. Y es que Edgar Salomón Esparza es empleado del mandatario y sirve a los intereses zavalistas.
Es más, fue Salomón quien dio una bienvenida que más parece malvenida a Pablo. Pero todos en la política poblana saben que el líder del Congreso no piensa por sí solo y ese mensaje se registra como la voz de López Zavala y si me apuran, hasta del mandatario quien dejó de mandar, ordenar y disponer en el PRI estatal.
Hoy quienes gobiernan al PRI son quienes están el poder: Estefan, Lastiri, Vega, Chedraui, Alcalá. En el PRI su dirigente Pablo Fernández tiene experiencia y carácter y sirve a los intereses de otros, pero no a los del zavalismo, del marinismo o del morenovallismo.
Puebla ya cambió.

El Verdugo
Personal de la Secretaría del Salud del estado se estaciona sin rubor alguno en doble fila sobre la calle 3 sur, frente a las oficinas de su titular Jorge Aguilar Chedraui. Si tienen estacionamiento priva a la vuelta sobre la 17 oriente, por qué pasar a fregar al simple ciudadano. El Verdugo dice: el estacionamiento privado es del secretario, no de los gastos.
Gracias